miércoles, 27 de octubre de 2010

Un libro cualquiera...

Mientras los doctores deliberan, el paciente sufre y en ocasiones se muere. Mientras el mundo llega a su fin para unos, bajo miradas resignadas, otros siguen construyendo el suyo propio como una torre de babel de naipes que tarde o temprano se derrumbará por una carta mal colocada o por su propio peso. Algunos viven en un mundo de fantasía en el cual la única barrera es su propia imaginación limitada por un vago e incierto conocimiento que casi siempre les lleva al error. Hay personas que viven más allá del límite de la vida en las memorias fatigadas de sus amigos y sus más que amigos, y personas que mueren ahogadas en el mar insaciable del olvido sin siquiera haber muerto, mientras los barcos incansables de la esperanza buscan exhaustivamente rescatar a los que todavía se mantienen a flote bajo el fuerte oleaje de la desesperación. Todos ellos están reinados por (estos forman una sociedad supuestamente unida en que reina) un orden caótico que se mantiene en un delicado equilibrio amenazado por la corriente de la inestable historia humana que tiende a repetirse una y otra vez, avanzando inevitablemente hacia su fin como cualquier libro que el hombre ha escrito, aunque nadie lo acepte, pero ¿hay algún libro que no tenga final?

jueves, 21 de octubre de 2010

Recuerdo...

No me da miedo el infierno 
con todo su fuego eterno; 
no me asusta la fría muerte 
ni la tumba más oscura. 
Tan solo me asusta perderte, 
que tu boca mis besos ya no quiera, 
que tus labios se me nieguen
 y que tus brazos mis brazos ya no necesiten.

Me preocupa que estés triste y que llores, 
pues sin tu sonrisa los días pierden sus soles.
Me asusta quedarme mudo y  decirte 
no poder lo mucho que te quiero, 
quedarme ciego aunque sea por un instante 
y no poder admirar tu bello rostro. 
Todo me asusta pero solo si es sin ti,
 porque sin ti ahora ya no tendría sentido el mí.

miércoles, 20 de octubre de 2010

¿Es la tristeza olvido o es el olvido triste?

Bien se yo que el tiempo pasará
y de tu memoria mi recuerdo
 como la niebla se esfumará 
sin siquiera rastro haber dejado. 


Tal vez el olvido sea triste 
o tal vez sea la tristeza olvido, 
pero que ello más hiriente 
es del dolor permanente recuerdo. 


La vida es corta para cualquiera,
pero que el amor es más duradera 
y en ella incesantemente buscando estamos 
lo que ni después de la muerte encontramos.

Nacer, crecer, morir, 
beber, comer, dormir 
y mucho más parece siempre sido haber 
la ley universal de nuestro mortal ser.


martes, 19 de octubre de 2010

Sigo soñando

Despierto
Abro los ojos y miro
¿Y que veo?
Nada. Soledad. ¿Tristeza?
No. ¿Qué es más triste que la tristeza?
¿Yo? Sí..yo ( no; más bien mi corazón)
Así que los vuelvo
A cerrar y sigo soñando,
Duermo, solo duermo;
Todo es silencio
Y los sueños ya no son
Sueños; son… ¿Qué son?
Si ya no están…
Todo está vacío y frio.

lunes, 18 de octubre de 2010

¿Olvido o recuerdo?

Necesito saber si el olvido 
que acecha es más dolor que la muerte, 
si un eterno olvido que un fugaz recuerdo 
es más doloroso, o si es la mente


la que tan cruel castigo impone
al desdichado corazón por osar 
hacerse a la soledad inmune, 
al aprender más allá de sí mismo a amar.


Necesito saberlo; pero me asusta
que al hacerlo mi frágil esperanza
naufrague en la solitaria costa
de la más amarga tristeza.

jueves, 14 de octubre de 2010

Página de un diario...¿?

“Hoy me llamaron desde la pastelería. Me dijeron que habían creado algo nuevo, algo que cambiaria para siempre mi opinión en lo que a los dulces respeta, que probaría la cosa más dulce
y tierna que jamás ha conocido la humanidad. Fui. Y nada más entrar por la puerta el olor me hizo pensar que había pisado el cielo. Tenía un aspecto realmente exquisito y un aroma irresistible que estremecía todos los sentidos. Lo probé mientras el pastelero me miraba con cara de expectación.
   ---Es dulce le dije, estoy realmente impresionado, los mismísimos dioses del Olimpo se despojarían de su inmortalidad para probar semejante manjar. Pero, sin embargo conozco algo muchísimo mejor. Su nombre es tan único como ella misma. Y los dioses no lo saben pero ella es perfecta, por lo menos para mí. Sus labios son más tiernos que cualquier cosa que se pueda probar y su boca es capaz de llevar el alma a la locura. Y sus besos pueden endulzar el corazón y hacer que cada latido sea una explosión de sensaciones tan agradables que siempre querrás repetir. Y su sonrisa…su sonrisa es sin duda la mayor fuente de alegría que conozco; puede convertir un día gris en un día soleado, y si la tienes al lado, en un día inolvidable por muy mal que hubiese empezado. Y a diferencia de tu pastel y todas las cosas de incalculable valor, ella no tiene precio alguno. Es perfecta; ella endulce la boca y no puede como tu pastel llenar el estomago, sino que llena el corazón. Podría seguir hablando de ella aun más; tanto que el tiempo se te haría eterno.
    -¡Enamorado! Contestó con una  sonrisa en su rostro. ¡No sabes la suerte que tienes!
   ---Estás equivocado. Lo sé perfectamente y la valoro por encima de todas las cosas. Por ella pelearía en contra del cielo si hiciera falta, aunque sé que saldría perdiendo,  porque soy mortal e imperfecto, no tengo alas ni nada de divino, pero mi perfección consiste en amarla, y no en vivir en el paraíso, y eso me hace sentir eterno.
   -¿Y cómo se llama?
  --No tiene aún...
  -Entonces es sólo un sueño...
-- Tal vez sólo sea eso.

miércoles, 13 de octubre de 2010

Nada vale la pena......

Abre los ojos y veras,
pues abiertos los tienes y a oscuras estas;
Sin luz de nada sirve ver
pues sin ver difícil resulta creer.

A veces lo que con los ojos logras ver
a la mente imposible resulta ser;
Nada es real, efímero es todo
y de lo efímero surge la duda y el miedo,

y del miedo surge el valor
de reconocer la cobardía y su horror:
el horror de ser humano,
de sentir que todo lo que haces es en vano.

Que en vano es luchar, amar
por alguien, una persona, que nunca valorar
sabrá tu esfuerzo, tu presencia
y que luego no notará tu ausencia.